Te invitamos a conocer los pueblos más bonitos de Alicante, tanto de la costa como del interior. Hay muchas zonas con encanto que tienes que visitar por sus paisajes, por su historia, por su gastronomía o por sus tradiciones. Continúa leyendo y conocerás siete poblaciones que no te puedes perder.
¿Dónde están los pueblos más bonitos de Alicante?
La provincia de Alicante cuenta con 140 municipios. Limita con Valencia, Murcia, Albacete y con el mar Mediterráneo. Su cercanía a la costa ha contribuido a que desde lo más antiguo fuese habitada por comunidades mediterráneas griegas, romanas, fenicias, cartagineses (descendientes de los fenicios) y árabes. Todas han dejado un importante legado arquitectónico y cultural.
Pero no podemos olvidar la riqueza natural. El mar Mediterráneo es visible desde gran parte de Alicante, incluso en zonas del interior. Es una de las regiones con mayor contraste entre mar y montaña, llegando algunas elevaciones hasta la costa. Algunos días de invierno es posible ver la nieve en lo alto de la montaña mientras se pasea por la costa.
Todos estos factores hacen que la provincia esté salpicada de poblaciones increíbles en las que pasar un día inolvidable. Estos son tan solo algunos de los pueblos más bonitos de Alicante.
Los siete pueblos más bonitos de Alicante
Estos son algunos de los pueblos más bonitos de Alicante que no te puedes perder. Te explicamos brevemente por qué tienes que visitarlos.
- Guadalest. Es un pintoresco pueblo ubicado en un valle. Destaca el entorno natural en el que se encuentra, lo pintoresco de sus calles y su castillo. Además, dispone de ocho curiosos museos, uno de los cuales está dedicado a las miniaturas.
- Biar. Sus calles y casas de aspecto medieval te llevan a un impresionante castillo impecablemente conservado. Es como una visita al pasado.
- Sax. Está presidido por un castillo amurallado y cercano a la sierra de Camara.
- Planes. Una población construida en la loma de un cerro. En la parte más alta hay un castillo de origen árabe. Además, posee un acueducto, una fuente natural y otras construcciones antiguas.
- Denia. Denia es una bonita población costera. Además de disfrutar de la playa, puedes visitar su castillo y el museo arqueológico que alberga. En él hay restos del paso de los romanos por Alicante.
- Calpe. Lo que más llama la atención de Calpe es el Peñón de Ifach, una roca de 332 metros de altura situada junto al mar. Pero también hay que destacar la playa y la gastronomía de la zona, a base de productos del mar.
- Altea. Su casco antiguo es precioso, además, al ser un pueblo elevado tiene unas impresionantes vistas al mar. Tiene algunos restaurantes en los que sirven platos típicos, entre ellos arroces alicantinos auténticos.
Por supuesto, para visitar todos estos pueblos, has de tener el depósito de tu vehículo lleno. Reposta en las gasolineras Petro Alacant y disfruta de la mejor calidad a un precio reducido.